El interés por el coche eléctrico no ha dejado de crecer en los últimos años, especialmente en Europa, EEUU y los países asiáticos más avanzados. ¿La razón? la suma de diversos factores como: las constantes innovaciones y mejoras en el ámbito de la electromovilidad, los cada vez más numerosos y eficientes puntos de carga privados y públicos o la cada vez más presente concienciación sobre el medioambiente y la sostenibilidad han creado el contexto idóneo para un rápido desarrollo de los vehículos eléctricos.
A lo largo de este blog post vamos a desgranar con detalle a qué se debe el rotundo éxito del coche eléctrico como ventajosa alternativa a los de combustión y por qué te puede interesar incorporarlos a la flota de vehículos de tu empresa:
Índice
Los coches eléctricos son la solución idónea para seguir disfrutando de las ventajas del vehículo privado, sin expulsar a la atmósfera altos niveles de CO2 y otros gases de efecto invernadero, como ocurre con los coches de combustión interna (gasolina o diésel).
Además, existen otras ventajas, como la sencillez de su funcionamiento, lo que permite ahorrar en costos de mantenimiento del vehículo o su facilidad de conducción.
Su funcionamiento se basa en un motor eléctrico, en vez de uno de gasolina o diésel, como ocurre con los vehículos de combustión interna. El coche eléctrico obtiene su energía de un paquete de baterías recargable, ubicado normalmente en el subchasis del vehículo.
Cuando "arrancamos" el motor de un coche eléctrico, el controlador toma la energía de las baterías y la envía al motor eléctrico, que se encarga de convertir la energía eléctrica en mecánica, provocando el movimiento de las ruedas.
Se trata, por lo tanto, de un funcionamiento mucho menos complejo que el de los coches de combustión, lo que se traduce en una mayor facilidad y rapidez de ensamblaje en las factorías, así como un mantenimiento más sencillo, reduciéndose la frecuencia y los puntos de revisión.
Un coche eléctrico no tiene caja de cambios ni embrague, por lo que su conducción es como la de un coche automático, con las ventajas que implica a nivel de sencillez y comodidad, ya que no nos tenemos que preocupar de si llevamos o no la marcha correcta. Una ventaja añadida es que nos ahorramos las costosas y frecuentes reparaciones de los embragues.
Otro aspecto que cabe destacar de los coches eléctricos es la ausencia de ruidos y vibraciones en cabina y la suavidad a la hora de conducir, lo que se traduce en una experiencia de conducción, por lo general, satisfactoria y relajante.
Por otro lado, es importante subrayar una importante diferencia entre los coches eléctricos y los de combustión que influye en la conducción: el par motor de los eléctricos es notablemente más elevado, por lo que se produce una mayor aceleración. Esto implica que cuando pasamos de conducir un coche de gasolina o diésel a uno eléctrico tenemos que acostumbrarnos a hacerlo con algo más de suavidad.
Una pregunta muy recurrente a la hora de apostar por la movilidad eléctrica es: ¿cuál va a ser la autonomía de mi coche eléctrico? Aquí, la “supuesta escasa autonomía” es el principal argumento de los detractores de los coches eléctricos, así como el factor que causa mayores reticencias entre los que no se acaban de convencer de si adquirir uno o no. Sin embargo, la realidad es que los modelos actuales pueden circular sin problemas varios centenares de kilómetros sin tener que pasar por un punto de recarga.
Prácticamente todas las grandes marcas de automóviles están apostando decididamente por la electromovilidad, realizando grandes inversiones en I+D+i con el objeto de ofrecer productos con mayor capacidad y eficiencia. Las baterías que alimentan los vehículos eléctricos son cada vez mejores, lo que permite que la autonomía este aumentando progresivamente.
Muchos de los nuevos modelos de vehículos totalmente eléctricos tienen, por lo general, una autonomía superior a 500 km, los más avanzados superan los 600 Km e, incluso, ya existen algunos concept cars que sobrepasan la barrera de los 1000 Km. de autonomía.
Según una clasificación elaborada por la prestigiosa revisa dedicada al mundo del motor CarandDrive, el coche eléctrico con mayor autonomía existente actualmente en el mercado es el Mercedes EQS, un lujoso modelo equipado con unas baterías de 107,8 kWh con una autonomía de 741 kilómetros. Se prevé que en los próximos años salgan a la venta diversos modelos de coches eléctricos que igualen y hasta superen esta cifra.
Con el objetivo de poder homologar la autonomía declarada por el fabricante de un coche eléctrico, y calcular la autonomía de forma que se establezcan unas condiciones iguales para todos los automóviles, se creó en un inicio el Ciclo de Homologación Europeo, conocido como NEDC (New European Driving Cycle) y posteriormente el Ciclo WLTP (World Harmonized Light-duty Vehicle Test Procedure).
La prueba de autonomía del ciclo NEDC se realiza con unas condiciones específicas: en el interior de un edificio, a unos 25 ºC, en llano, sin viento, únicamente con el conductor, con todo apagado a excepción del motor y sobre rodillos motorizados.
La prueba de consumo del ciclo europeo de homologación NEDC es igual para todos los coches, ya sean de motor de combustión interna de gasolina, diésel o gas, híbridos enchufables o no y vehículos 100 % eléctricos.
Pero a medida que la tecnología de los vehículos eléctricos ha ido evolucionando, este sistema de medición se ha ido quedando obsoleto, perdiendo prácticamente toda representatividad por lo que los fabricantes tienden a dar el valor de autonomía de sus vehículos en base al Ciclo WLTP.
La principal diferencia entre estos dos protocolos es que el ciclo WLTP incorpora algunas variables que anteriormente no eran tenidas en cuenta y que pueden ser determinantes en los valores reales de autonomía de un vehículo eléctrico de nueva generación. Estas variables son la aerodinámica, la resistencia a la rodadura y el peso del vehículo.
Los distintos factores relacionados con cómo cargar las baterías de los coches eléctricos son: eficiencia, vida útil, cómo cargarlas correctamente, tiempos y precios de recarga, disponibilidad de puntos de recarga o tipos de baterías y cargadores.
Estos puntos generan muchas dudas entre los usuarios. Por ello, a continuación, resolveremos todas estas cuestiones punto por punto:
Las principales recomendaciones para asegurar la eficiencia de las baterías y alargar su vida útil son:
Pues el tiempo de carga dependerá principalmente de la potencia con la que carguemos la batería. Esto viene definido por la potencia máxima a la que puede cargar un cargador y la potencia máxima de carga que acepta nuestro vehículo.
Llamamos carga normal o lenta la que realizamos en el propio domicilio o en un cargador estándar público. En este caso la duración de carga dependerá principalmente de la potencia co la que carguemos, en domicilio particular solemos tener una potencia contratada entre 3-4 kW y 7 kW y con ello podremos recargar completamente la batería en unas 8-10 horas.
En un cargador público esta carga puede llegar a estar entre 11 kW y 22 kW por lo que el tiempo de recarga puede reducirse hasta las 6-8 horas dependiendo del tamaño del paquete de baterías.
Pero existen opciones más rápidas: las estaciones públicas de recarga con puntos de carga semi-rápidos, que pueden cargar a unos 50 kW y completar el 80% de la carga de la mayoría de baterías de los coches eléctricos en apenas 2 horas., y con puntos de carga rápida o ultrarrápida, capaces de reducir el tiempo de recarga a unos 15-25 minutos.
No obstante, en todos los modelos de nuestra web encontrarás el tiempo de carga de cada vehículo y los detalles en cuanto a su autonomía.
La pregunta de cuánto cuesta cargar un coche eléctrico no es fácil de contestar con exactitud, puesto que, como sabemos, el precio de la electricidad puede ser muy variable y depende de factores tan diversos como: precio del kWh en cada momento, potencia y tarifa contratada, hora de la recarga, etc.
Lo más económico a la hora de recargar la batería será siempre hacerlo con una carga lenta y desde nuestra casa. Además hoy en día muchas comercializadoras ya ofrecen tarifas específicas para conductores de coches eléctricos. La web especializada motorpasion.com realizó una estimación con precios medios de la electricidad del año 2021, que arrojó los siguientes datos: por 2,86 € podíamos recargar unos 20 kWh, que sería el equivalente a unos 100-130 km, según el consumo de cada modelo de coche eléctrico. Un gasto, sin duda, mucho menor que la gasolina o diésel.
Evidentemente, con todo lo acontecido este último año, este dato ya está desfasado debido al crecimiento exponencial que ha experimentado el precio del kWh. en el mercado por lo que el coste ha aumentado. Pero igualmente sigue estando muy por debajo del coste que supone repostar un coche de combustión interna y no debemos olvidar que actualmente existen muchos cargadores públicos que siguen siendo gratuitos y que por tanto harán que podamos seguir rodando con nuestro coche sin necesidad de soportar ningún coste adicional.
También existen otras formas de reducir el coste doméstico de electricidad, y la principal es optar por la instalación de paneles solares en el domicilio particular que, combinado con un cargador que te permita recargar a las horas de producción de los paneles, hará que tu coste se reduzca prácticamente a cero.
Pero, ¿qué pasa si nos encontramos en ruta y necesitamos realizar una carga rápida o ultrarrápida? Entonces debemos asumir el coste kWh de que cada una de las redes de recarga que actualmente están disponibles. A continuación os detallamos algunos de los precios de las principales redes actuales en España:
| Tesla | 0,41€ kWh |
| Iberdrola | 0,39€ kWh (50 kW) - 0,45€ kWh (150 kW) |
| EasyCharger | 0,30€ kWh (50 kW) - 0,40€ kWh (90 kW) - 0,55 kWh (>150kW) |
| Ionity | 0,79€ kWh (Sin Suscripción) |
| Wenea | 0,39€ kWh (50 kW) - 0,49€ kWh (100-200 kW) |
| Cargacoches | 0,26€ kWh (50 kW) - 0,41€ kWh (90 kW) |
| Endesa | 0,40€ kWh (Cliente Registrado, 50kW a 350 kW) - 0,45€ kWh (No Clientes) |
| Repsol | 0,44€ kWh |
La eficiencia y vida útil de la batería, los puntos de recarga y, muy especialmente, la autonomía son los aspectos que más preocupan a los usuarios que se plantean adquirir vehículos eléctricos. Es indudable que se trata de retos importantes que la industria de la automoción está consiguiendo resolver con solvencia.
Uno de los principales componentes de cualquier vehículo eléctrico es la batería, ya que es el elemento determinante a la hora de definir su autonomía y eficiencia. En la actualidad, los coches eléctricos pueden ir equipados con alguno de los siguientes tipos de baterías:
En lo que respecta a los cargadores o conectores (enchufes) de las baterías existen diversas opciones en el mercado pero básicamente debéis tener en cuenta las que os detallamos a continuación y que son las más extendidas.
Según datos de las patronales de fabricantes de vehículos (Anfac) y concesionarios (Faconauto), actualmente en España hay unos 11.517 puntos de recarga de acceso público, lo que supone 245 puntos por millón de habitantes. La mayoría, aproximadamente un 83%, son de carga lenta (inferiores a 22 kW).
Si quieres consultar nuestro mapa de puntos de recarga podrás verlo en la home de nuestra web o haciendo click aquí.
Pese a que se trata de un número bajo comparado con los países europeos más avanzados en electromovilidad, está previsto aumentar considerablemente en los próximos años y cada vez existen más proyectos que trabajan en esta dirección.
Un motor eléctrico se divide en cuatro grandes partes: cargador embarcado, batería, convertidor y el motor propiamente dicho. Si lo comparamos con un motor de combustión, donde encontramos pistones, cilindros, cigüeñales o sistemas de escape, entre otros muchos elementos, un motor eléctrico tiene una estructura mucho más sencilla, lo que traduce en 3 puntos clave:
El funcionamiento del motor eléctrico de un vehículos puede sintetizarse así:
Con el objeto de incentivar la sustitución de vehículos de combustión por eléctricos, así como el despliegue de la infraestructura de recarga, el gobierno y las administraciones española han puesto en marcha un programa de ayudas y subvenciones: el Plan Moves III.
El Plan Moves III es la tercera edición del programa de ayudas directas para la adquisición de vehículos eléctricos por el Gobierno de España. El principal objetivo del Plan MOVES es la creación de un parque móvil eléctrico importante en España y una red de recarga suficiente. El objetivo es alcanzar más de 100.000 puntos de recarga y 250.000 vehículos eléctricos para 2023. Según el Gobierno de España esto permitirá evitar más de 450.000 toneladas de CO2 y generará empleo y actividad a lo largo de toda la cadena de valor de la movilidad eléctrica.
Las ayudas del Plan Moves III están destinadas a particulares, autónomos, PYMES, grandes empresas y administraciones que realicen una inversión en un vehículo eléctrico de menos de 45.000€ (IVA no incluido). Se establece un límite de 50 vehículos electrificados por destinatario final. Es decir, que una empresa podrá renovar su flota con 50 vehículos como máximo con el MOVES III.
Turismos 100% eléctricos (EV o BEV) con autonomía eléctrica superior a 90 km
Si quieres consultar toda la información sobre el Plan Moves III, puedes verla en el siguiente apartado de nuestra web.
Aunque el precio de un coche eléctrico es, en la actualidad, sensiblemente superior a otro equivalente de combustión, lo cierto es que existen otras muchas razones por la que compensa comprar un coche eléctrico:
No obstante, teniendo en consideración que es una inversión muy grande en un ámbito poco conocido para muchas personas, la opción del renting de coches eléctricos es muy buena solución para testear este tipo de conducción.
El renting de vehículos eléctricos es una opción fantástica para aquellas personas que quieren ser precursoras de la conducción eléctrica y ayudar a mantener un entorno más sostenible sin necesidad de hacer una gran inversión inicial.
El renting de vehículos eléctricos está ganando cada vez más fuerza frente a la compra de vehículos, especialmente entre empresas grandes, pymes y autónomos por las siguientes ventajas:
Permite beneficiarse de ayudas, subvenciones, beneficios fiscales y ventajas como: parking gratuitos o libre circulación por carriles y zonas reservadas a vehículos con emisiones cero.
Para elegir el mejor coche eléctrico idóneo para tu flota debes tener en cuenta las necesidades de movilidad de tu empresa, en especial el número de kilómetros diario y el tipo de trayectos para calcular cuánta autonomía precisas, así como las posibilidades económicas y cuestiones como la imagen que queremos transmitir.
Algunos de los coches eléctricos más destacados del mercado, que suelen tener una gran aceptación entre las empresas son los siguientes:
Tesla es, probablemente, la marca líder y de referencia en coches eléctricos, destacando por sus atractivos y lujosos diseños gran autonomía (entre 500-600 km en función del modelo) y la posibilidad de cargarlos en poco más de media hora en los supercargadores Tesla.
Vehículos muy fiables, espaciosos, con una autonomía suficiente para el usuario medido y un precio competitivo. Su gran relación calidad-precio y excelentes prestaciones, lo han convertido en un opción de coche eléctrico de calidad muy bien valorada por las empresas.
Se trata de coches eléctricos económicos y muy cómodos, aunque generalmente de autonomía inferior (no suelen llegar a los 300 km) que los modelos anteriores.
Cupra es la marca premium de Seat, la cual se caracteriza por integrar la tecnología eléctrica más avanzada, junto a un diseño impactante y elegante y una gran autonomía. Todo ello a un precio competitivo, lo que la convierte en una opción muy recomendable.
Kia está apostando fuerte por modelos de excelentes prestaciones, que les permitan hacerse con un hueco en el mercado de la electromovilidad. Su autonomía es suficiente (400 km o más según el modelo) y en terminales de carga rápida es posible cargar la batería en menos de 20 minutos.
Ford dispone de una amplia gamas de modelos eléctricos, con diferentes diseños, calidades, autonomías y acabados que nos permite escoger el modelo que más se adapte a nuestras necesidades, asegurando siempre un precio muy competitivo.
Sin duda es una de las opciones más económicas, pero con una calidad y prestaciones satisfactorias y suficientes para la mayoría de usuarios.
En Mobilty Service somos expertos en renting vehículos eléctricos y podemos ayudarte a realizar la transición hacia la movilidad eléctrica de la flota de tu empresa, con todas las garantías de éxito.