Ana García
En un escenario empresarial donde la eficiencia económica y el compromiso medioambiental marcan la diferencia, electrificar la flota corporativa ya no es una opción futura: es una decisión estratégica clave. La flota eléctrica representa un nuevo modelo de movilidad empresarial que permite reducir gastos operativos, mejorar la imagen de marca y cumplir con las normativas ambientales más exigentes.
En este artículo, exploramos en profundidad qué implica una flota eléctrica, cuáles son sus beneficios tangibles y cómo implantarla de forma progresiva y eficaz.
¿Qué es exactamente una flota eléctrica?
Una flota eléctrica es un conjunto de vehículos corporativos que utilizan propulsión eléctrica en lugar de motores térmicos tradicionales. Esto incluye tanto vehículos 100% eléctricos (BEV) como híbridos enchufables (PHEV), aunque el foco está cada vez más en los eléctricos puros por sus ventajas operativas y medioambientales.
Esta transformación afecta tanto a los vehículos como a su gestión:
- La energía ya no se suministra en gasolineras, sino mediante cargadores.
- El mantenimiento se simplifica, pero requiere personal formado.
- La planificación de rutas y tiempos de carga se vuelve fundamental.
La electrificación es especialmente relevante para empresas de logística, transporte urbano, distribución de mercancías, asistencia técnica y servicios de movilidad compartida, donde el kilometraje diario y el uso intensivo hacen que los beneficios económicos se multipliquen.
Ventajas clave de electrificar tu flota
1. Reducción significativa de costes operativos
Uno de los principales motivos por los que las empresas optan por una flota eléctrica es la disminución del coste total de propiedad (TCO). Aunque los vehículos eléctricos suelen tener un precio de compra más alto, este se amortiza rápidamente gracias a:
- Coste por kilómetro inferior: recargar con electricidad cuesta hasta un 70% menos que repostar gasolina o diésel.
- Mantenimiento más económico: los motores eléctricos tienen menos piezas móviles, no requieren cambios de aceite y presentan menos averías.
- Beneficios fiscales: exenciones en el impuesto de matriculación, descuentos en el IBI de vehículos, y deducciones en el IRPF o el impuesto de sociedades en función del uso.
- Ayudas públicas como el Plan Moves, que cubre parte del coste de adquisición e infraestructuras de carga.
Empresas que ya han comenzado la transición han reportado ahorros superiores al 40% en los gastos anuales asociados a sus flotas. Además muchas de las empresas optan por el renting lo que todavía hace que dar el salto a la movilidad eléctrica sea todavía más fácil.
2. Cumplimiento normativo y acceso a zonas de bajas emisiones
La legislación europea está empujando a las ciudades hacia la descarbonización de la movilidad. Desde 2023, las urbes con más de 50.000 habitantes deben contar con zonas de bajas emisiones (ZBE). En ellas, los vehículos contaminantes tienen restringido el acceso.
Además, a partir de 2035, la UE prohibirá la venta de vehículos con motor de combustión interna nuevos. Contar desde ya con una flota eléctrica garantiza el acceso sin restricciones a cualquier núcleo urbano, lo que protege la operativa de la empresa frente a posibles sanciones o limitaciones logísticas.
Electrificar tu flota es anticiparte al futuro y evitar sorpresas.
3. Mejor imagen corporativa y reputación ESG
Cada vez más consumidores, inversores y empleados valoran el compromiso real de las empresas con la sostenibilidad. Adoptar una flota eléctrica transmite:
- Una imagen moderna, alineada con los valores ecológicos y de innovación.
- Coherencia con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) y políticas ESG (Environmental, Social and Governance).
- Sensibilidad con el impacto climático y responsabilidad social.
Muchas grandes marcas comunican activamente sus esfuerzos en movilidad sostenible como parte central de su narrativa corporativa. Una flota eléctrica no solo reduce tu huella de carbono: te posiciona como líder consciente en tu sector.
¿Qué tipos de vehículos puedes electrificar?
La electrificación no se limita solo a coches de empresa. La variedad de modelos disponibles permite adaptar la tecnología eléctrica a múltiples necesidades:
- Turismos eléctricos para uso comercial, visitas o directivos.
- Furgonetas eléctricas para reparto urbano o servicios técnicos.
- Camiones ligeros eléctricos para logística y transporte de mercancía.
- Vehículos industriales para entornos cerrados, como aeropuertos o almacenes.
- Motos y bicicletas eléctricas para servicios de reparto de última milla.
Gracias al crecimiento del mercado y la bajada de precios, ya existen alternativas eléctricas para casi cualquier perfil de uso profesional.
Cómo electrificar tu flota paso a paso
1. Auditoría previa: analizar la situación actual
Antes de dar el salto a la movilidad eléctrica, es recomendable realizar un diagnóstico preciso del uso que se hace de la flota:
- ¿Cuántos kilómetros recorren los vehículos al día?
- ¿Qué rutas realizan?
- ¿Dónde se estacionan por la noche?
- ¿Qué vehículos son más antiguos o ineficientes?
Este análisis te permitirá identificar qué parte de tu flota se puede electrificar de forma inmediata y qué modelos son los más adecuados para reemplazar.
2. Diseñar un plan de transición gradual
No es necesario electrificar toda la flota de golpe. Una estrategia escalonada minimiza el riesgo:
- Empieza por zonas urbanas o vehículos con rutas predecibles.
- Opta por el renting, será mucho más fácil.
- Evalúa resultados y ajusta el plan en función del retorno.
Algunas empresas arrancan con un 20% de la flota electrificada y escalan progresivamente según necesidades y beneficios observados.
3. Instalar la infraestructura de carga adecuada
Disponer de puntos de carga propios es clave para asegurar la operatividad de la flota. Dependiendo de tu actividad, podrás optar por:
- Carga lenta (3,7 a 7,4 kW) en parkings de empleados o flotas con pausas largas.
- Carga semirrápida (11–22 kW) para vehículos con uso intermedio.
- Carga rápida (50 kW o más) para furgonetas y camiones con alta rotación.
Además, puedes integrar energía renovable (por ejemplo, placas solares) para reducir aún más los costes energéticos y mejorar tu impacto ambiental.
4. Formar al equipo y adaptar la gestión
Electrificar una flota no solo implica cambiar vehículos, sino también procesos:
- Formación para conductores sobre conducción eficiente y planificación de recargas.
- Adaptación del software de gestión de flotas para incluir datos sobre batería, consumos o rutas optimizadas.
- Monitorización constante para detectar ineficiencias y anticipar mantenimientos.
Un equipo bien formado es la base para maximizar el rendimiento de tu flota eléctrica.
5. Medición de resultados y escalado
Tras la implantación inicial, es imprescindible medir los impactos:
- Comparativa de costes por kilómetro antes y después.
- Reducción de emisiones y huella de carbono.
- Feedback de conductores y clientes.
- ROI alcanzado y plazo de amortización.
Con esta información podrás escalar el modelo de forma sólida, convenciendo tanto a la dirección como a otros departamentos de la organización.
Casos de éxito de electrificación de flotas
En España, numerosas compañías ya han liderado la transición eléctrica:
- SEUR y DHL han electrificado parte de su flota para reparto urbano.
- IKEA cuenta con vehículos 100% eléctricos para entregas en ciudades.
- Empresas como Endesa X e Iberdrola combinan flotas eléctricas con producción solar para un modelo más circular.
- En EV Renting somos expertos en movilidad eléctrica y la única empresa de renting en España que ofrece vehículos 100% eléctricos para empresas y autónomos..
Estas experiencias demuestran que la electrificación no solo es viable, sino rentable y estratégica.
Conclusión: una flota eléctrica es una ventaja competitiva real
La flota eléctrica ha dejado de ser un proyecto experimental para convertirse en una herramienta clave de eficiencia, cumplimiento legal y liderazgo en sostenibilidad. Las empresas que tomen la delantera estarán mejor posicionadas frente a sus competidores, reducirán riesgos regulatorios y mostrarán un compromiso claro con el planeta.
¿Quieres comenzar a electrificar tu flota? Da el primer paso ahora y contacta con nosotros. Recuerda que en EV Renting somos expertos en movilidad 100% eléctrica. Te ayudamos a diseñar el plan más eficaz según tu operativa, sin riesgo y con retorno claro.