Si trazásemos una línea imaginaria para representar los principales argumentos favorables al renting para empresas de vehículos eléctricos, esta pasaría por diversos puntos clave. Entre ellos: ventajas fiscales, subvenciones y ayudas, ahorro de costos en diferentes partidas, el poder contar con coches nuevos y de calidad sin tener que realizar una gran inversión inicial o la mejora de la imagen de la empresa y sus profesionales.
En este artículo te desvelamos por qué te interesa apostar ya por el renting eléctrico para la flota de vehículos de tu empresa.
Desde un punto de vista puramente fiscal, el renting de vehículos es muy beneficioso para las empresas. Su principal ventaja es que, al no formar parte del activo de la empresa, puede incluirse como gasto y no genera deuda. Además, las tasas e impuestos quedan incluidos en la cuota por lo que ya no deben preocuparte.
Por otro lado, optar por la movilidad eléctrica abre las puertas a recibir diversas ayudas de la Unión Europea y de los gobiernos, administraciones y ayuntamientos, las cuales no están dirigidas únicamente para la compra de vehículos eléctricos. La modalidad de renting eléctrico también forma parte de las ayudas directas del Plan Moves III.
Por otro lado, optando por la opción de vehículo 100% eléctrico también debes tener en cuenta que estarás exento de pagar el impuesto de matriculación y tendrás también una importante reducción en el impuesto de circulación. Todo ello repercutirá en disponer de una cuota de renting mucho más competitiva.
Y no solo eso, existen también ayudas para instalar cargadores en la propia empresa, estacionamiento gratuito en algunos parkings públicos y libre circulación por determinados carriles o zonas reservadas a vehículos con emisiones cero.
En un contrato de renting únicamente se paga una cuota mensual, nada más. Dicho esto, la pregunta es: ¿qué incluye la cuota mensual de renting para empresas? Lo cierto, es que, salvo el coste de la recarga (que también hay opciones para incluirla, como servicio extra), prácticamente todos los gastos relacionados con el vehículo de empresa están incorporados en único recibo mensual: seguro, mantenimiento, revisiones, reparaciones, cambios de neumáticos, etc.
Esto permite un control total del gasto en movilidad, sin inversiones iniciales, financiación, ni imprevistos, lo que implica ahorro de los costos totales y en poder gestionar la tesorería de la empresa de un modo regular, fluido y sin tensiones.
Otra de las grandes ventajas del renting eléctrico es que aporta un altísimo grado de flexibilidad, lo que se traduce en muchísimos beneficios.
Por un lado, es posible adaptar la flota de vehículos a las necesidades o posibilidades económicas de la empresa en cada momento. Además, es posible renovar la flota de vehículos cada poco tiempo, disponiendo así de modelos nuevos y actualizados. Esto redunda en una mayor comodidad y bienestar para los empleados.
Pasarse a la movilidad eléctrica es una de las formas más eficaces de transmitir una imagen de empresa moderna y comprometida con el medioambiente y la sostenibilidad. Se trata de valores compartidos con una gran parte de usuarios, posibles clientes y la sociedad en general, lo que ayuda a generar identificación y cercanía.
El renting fijo para empresas que ofrecemos en Mobility Service Electric Renting abarca un período de entre tres y cinco años. Una vez el contrato de renting llegue a su fin, tendrás la opción de hacer un nuevo contrato de renting, renovando la flota con coches nuevos pero también puedes optar a la compra del vehículo si así lo deseas (aunque esta es una opción más propia del leasing y no es lo que recomendamos desde nuestra empresa).
Confía en Mobility Service para entrar en la movilidad eléctrica a través del renting de tu flota. Nuestro equipo de expertos en vehículos eléctricos analizará cuáles son tus necesidades específicas y le ofrecerá las mejores soluciones para que la transformación de la flota de su empresa se realice con las mejores garantías y cero problemas.