Ana García
En un mundo cada vez más consciente de la necesidad de reducir nuestra huella de carbono, los vehículos eléctricos se han posicionado como una alternativa prometedora a los tradicionales vehículos de combustión interna. Sin embargo, la percepción a menudo se centra en la ausencia de emisiones durante la conducción, obviando un proceso más complejo que abarca todo el ciclo de vida de este tipo de vehículos, desde que comienza su fabricación, pasando por toda su vida útil, hasta cuando se recicla la batería.
Con este artículo queremos ofrecer una visión completa y transparente sobre el impacto ambiental de esta tecnología. Además de desentrañar los mitos y realidades en torno a la huella de carbono de los coches eléctricos, analizando cada etapa de su ciclo de vida.
La Fabricación: Un inicio eléctrico
La fabricación de un vehículo eléctrico, especialmente de su batería, requiere una cantidad considerable de energía. La extracción de materiales como el litio, el cobalto y el níquel, así como los procesos de fabricación de las celdas y módulos, generan emisiones de gases de efecto invernadero. Además, la producción de los componentes electrónicos e incluso la propia estructura del vehículo también contribuyen a esta huella carbono inicial.
Sin embargo, hay que destacar que la industria automotriz está invirtiendo fuertemente en la optimización de estos procesos, buscando fuentes de energía más limpias y materiales reciclados. A medida que la demanda de vehículos eléctricos crece, se espera que los costes de producción disminuyan y el proceso de producción sea cada vez más eficiente.
La Primera Vida Útil: el inicio en la movilidad eléctrica
Una vez que un vehículo eléctrico sale de la fábrica, su impacto ambiental durante la conducción es significativamente menor en comparación con un vehículo de combustión interna. Al no emitir gases de efecto invernadero directamente, los coches eléctricos contribuyen a mejorar la calidad del aire en las ciudades y reducen las emisiones de partículas contaminantes que contaminan la atmósfera.
Sin embargo, la electricidad utilizada para cargar las baterías proviene de una red eléctrica que, en muchos casos, todavía depende en gran medida de fuentes fósiles. Por lo tanto, la huella de carbono de un vehículo eléctrico durante su uso está directamente relacionada con donde se carga. A pesar de esto, hay que destacar que cada vez es mayor el porcentaje de energía eléctrica que procede de fuentes renovables. En 2023, del cómputo total de la potencia instalada en España, el 61,3% correspondió a fuentes renovables.
La Segunda Vida del Coche Eléctrico: EV ReDrive
Una vez que el vehículo eléctrico ha cumplido un primer ciclo de vida útil llega el turno de ReDrive, pero… ¿Qué es ReDrive? EV ReDrive es una modalidad de renting de vehículos
100% eléctricos usados, completamente revisados, procedentes de nuestros contratos de renting ya finalizados. La particularidad de esta modalidad de contrato es que tiene la posibilidad de un plazo mínimo de permanencia de 3 meses.
EV ReDrive es una opción ideal cuando tus necesidades de movilidad son variables y difíciles de estimar. Además, optar por este tipo de vehículos es una buena forma de darle una segunda vida a vehículos eléctricos que funcionan perfectamente.
Las baterías también tienen una segunda vida
Una de las grandes ventajas de los vehículos eléctricos es la posibilidad de reutilizar sus baterías una vez que se degradan lo suficiente. Estas baterías pueden encontrar una segunda vida en sistemas de almacenamiento de energía estacionarios, como en hogares o edificios comerciales, contribuyendo a estabilizar la red eléctrica y a integrar una mayor proporción de energías renovables.
Además, el desarrollo de tecnologías de reciclaje de baterías está avanzando rápidamente, lo que permitirá recuperar materiales valiosos y reducir la dependencia de nuevas materias primas.
El Reciclaje: Cerrando el Ciclo
El reciclaje de las baterías de los vehículos eléctricos es un aspecto fundamental para garantizar la sostenibilidad a largo plazo de este tipo de tecnología. Aunque todavía existen desafíos técnicos y económicos, la investigación en este campo está avanzando a pasos agigantados.
Los procesos de reciclaje permiten recuperar materiales como el litio, el cobalto y el níquel, que pueden ser reutilizados en la fabricación de nuevas baterías o en otras aplicaciones industriales. Además, el reciclaje contribuye a reducir la generación de residuos y a minimizar el impacto ambiental de la extracción de nuevos materiales. En el video que os dejamos a continuación os explicamos de forma más detallada cómo es este proceso.
La Elección del Renting: Una Opción Sostenible y Flexible
En EV Renting, creemos que el renting de vehículos eléctricos es la opción más sostenible y flexible para las empresas que buscan reducir su huella de carbono y optimizar su flota. Al apostar por el renting, tus empleados podrán disfrutar de los beneficios de la movilidad eléctrica sin las preocupaciones asociadas a la compra y mantenimiento de un vehículo.
En conclusión, la huella de carbono de un vehículo eléctrico es un tema complejo que abarca todo su ciclo de vida. Si bien la fabricación y la procedencia de la energía eléctrica para cargarlo pueden generar emisiones. A pesar de esto, las ventajas ambientales de los vehículos eléctricos durante su uso y la posibilidad de reutilizar y reciclar sus baterías hacen de esta tecnología una opción cada vez más atractiva.
Recuerda que en EV-Renting somos especialistas en movilidad sostenible. En nuestro catálogo podrás encontrar los modelos 100% eléctricos que mejor se adapten a las necesidades de tu empresa. Si quieres electrificar la flota de vehículos de tu empresa y necesitas más información no dudes en contactar con nuestro equipo.