La transición a la movilidad eléctrica en España ha pasado de ser una promesa a una necesidad estratégica, especialmente para las PYME. Sin embargo, la barrera del precio de compra inicial de un vehículo eléctrico a menudo genera dudas.
Aquí es donde el Renting Eléctrico PYME se posiciona como la herramienta financiera más inteligente. No solo permite descarbonizar tu flota, sino que ofrece un potencial de ahorro considerable a largo plazo.
En este artículo, vamos a desglosar cómo calcular el ahorro real a través del Coste Total de Propiedad (TCO), y exploraremos las ventajas fiscales específicas que hacen del renting eléctrico la opción más rentable para tu empresa en 2025.
El error más común al evaluar una flota es fijarse solo en el precio de adquisición. Para una PYME, la decisión debe basarse en el Coste Total de Propiedad (TCO), que es el coste real del vehículo a lo largo de su vida útil.
El TCO del coche de combustión es alto debido a los costes ocultos; el TCO del vehículo eléctrico se reduce drásticamente por tres factores clave:
Los vehículos eléctricos tienen significativamente menos piezas móviles que un motor de combustión. Esto se traduce en:
Esta es la partida de mayor ahorro para una PYME con alto kilometraje:
| Gasto | Coche de combustión (Ej. 6l / 100 km) | Coche eléctrico (Ej. 17 kWh/ 100 km) |
| Coste por 100 km | ~9,6 € (con gasolina a 1,6 €/l) | ~3,4 € (con electricidad a 0,20 €/kWh) |
| Ahorro | - | ~65% de ahorro por kilómetro recorrido |
Un vehículo que recorra 30.000 km al año puede generar un ahorro en energía de más de 1.800 € anuales, una cifra muy relevante para cualquier PYME.
La tecnología eléctrica evoluciona muy rápido, lo que provoca una depreciación más acelerada en los vehículos. Al optar por el renting, tu PYME elimina este riesgo por completo, ya que la empresa de renting asume la pérdida de valor al finalizar el contrato. Esto garantiza que siempre tendrás acceso a la tecnología más reciente sin el riesgo de obsolescencia.
La fiscalidad es el otro pilar que hace imbatible al renting eléctrico en el contexto de la PYME y el autónomo en España:
La cuota mensual de renting incluye el IVA. Si la PYME demuestra que el uso del vehículo es 100% profesional, puede deducir la totalidad del IVA. En la práctica, Hacienda suele aceptar una deducción del 50%, pero esto sigue siendo una ventaja superior a la compra tradicional.
Las cuotas de renting se consideran un gasto de explotación y son totalmente deducibles de la base imponible del Impuesto de Sociedades. Esto tiene un impacto directo en la reducción de la factura fiscal de la empresa, una ventaja esencial que una compra al contado o financiada no ofrece con la misma inmediatez y facilidad.
A esto se suman las ayudas públicas, como el actual Plan MOVES III que en 2026 pasará a ser el Plan Auto 2030, que ofrece subvenciones directas por la adquisición o renting de vehículos eléctricos. Estas ayudas pueden aplicarse para reducir la cuota inicial o la cuota mensual, haciendo el acceso al renting eléctrico aún más asequible.
Puedes leer nuestro artículo Plan Auto 2030: Centralización de ayudas para coches eléctricos.
Más allá de los costes, el renting eléctrico ofrece a la PYME una flexibilidad operacional crítica en un entorno económico cambiante.
Si tu PYME aún tiene dudas sobre la adaptación a la infraestructura de carga o la autonomía, un plan de Renting flexible te permite probar la movilidad eléctrica sin atarte a un contrato a largo plazo. Se trata de un vehículo eléctrico de ocasión con el que puedes firmar un contrato de tres meses de duración. El Renting 360 es la mejor forma de saber si el coche eléctrico es la opción que estás buscando.
Las políticas de Movilidad Eléctrica proyectan una imagen de empresa comprometida con la sostenibilidad, algo cada vez más valorado por clientes y licitaciones públicas.
Ciudades como Madrid y Barcelona lideran la transformación, como lo confirman los datos de AEDIVE, con una creciente infraestructura de carga. Los vehículos eléctricos con distintivo CERO de la DGT garantizan el acceso sin restricciones a las Zonas de Bajas Emisiones (ZBE), asegurando la operatividad de tu flota en el centro de las ciudades.
El renting es generalmente mejor, ya que elimina el riesgo de depreciación, incluye todos los costes operativos (mantenimiento, seguro, averías) en una cuota fija y maximiza las ventajas fiscales al deducir la totalidad del gasto.
Los contratos suelen oscilar entre 24 y 60 meses. En EV Renting ofrecemos opciones de renting flexible que te permiten probar el vehículo con una permanencia mínima de tres meses.
El renting incluye, por lo general, la garantía y el mantenimiento de la batería. Los fallos o degradaciones excesivas corren a cargo de la empresa de renting, lo que asegura que tu PYME no asumirá costes inesperados por el componente más caro del vehículo.
Para una PYME en España, el renting eléctrico es la vía más lógica y rentable para acceder a la nueva movilidad. Al analizar el TCO, queda claro que el ahorro en mantenimiento y energía, sumado a la deducción fiscal del IVA y del Impuesto de Sociedades, convierte la cuota de renting en una inversión estratégica que reduce costes operativos a largo plazo.
No pospongas más la electrificación de tu empresa. Es el momento de liderar la sostenibilidad y optimizar tu flota de vehículos eléctricos.
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